Este Smart llegó a nuestro taller como cualquier otro: pequeño, urbano, simpático. Un auto pensado para el tráfico, para los estacionamientos imposibles y para la rutina de ciudad. Pero en People Garage no vemos un auto por lo que es… sino por lo que puede llegar a ser. Y este Fortwo tenía pintada una doble vida.
Lo tomamos completamente original y decidimos convertirlo en algo que nadie esperaría: un mini 4×4 urbano con actitud de gigante. Arrancamos levantándolo 3 pulgadas, una modificación clave para dejar de ser “city car” y empezar a jugar en terrenos donde un Smart nunca estuvo invitado. Ese nuevo despeje abrió la puerta a lo que vendría: llantas de 15″ con neumáticos Yokohama de uso mixto, un combo que transforma la postura del auto y le da personalidad de explorador.




Después llegó lo serio: bumpers reforzados y diseñados a medida, no solo para darle una estética más agresiva, sino para que pueda soportar golpes reales de uso fuera de ruta. Nada de plásticos decorativos: acero, tornillos, y propósito.
El corazón sigue siendo un confiable y económico motor Mercedes-Benz, perfecto para un proyecto que tenía que ser divertido pero también funcional y durable. Y para el toque final, le dimos algo que permite jugar con su identidad: un wrap increíble, pensado para destacarse del resto, un toque totalmente original. El auto puede ser corporativo, deportivo, militar o urbano… depende del humor del dueño.




Hoy este Smart es más que un Fortwo modificado. Es una declaración. Una prueba de que el tamaño nunca define el carácter, y de que cualquier vehículo puede ser transformado en algo único si se lo mira con imaginación y se lo trabaja con técnica.
Pequeño por fuera, pero con ganas de comerse el mundo.

